Alcachofas

RICAS ALCACHOFAS

Rustica planta el cardo, engendrando en su centro la preciada alcachofa, cuyo nombre significa en el lenguaje de las flores "mujer fácil", pues con eliminar algunas hojas se alcanza su corazón.

Dejándonos de cursilerías os diré que la planta de la alcachofa no es más que el resultado del cultivo refinado del cardo borriquero, que con la selección durante cientos de años se ha llegado a las variedades existentes actualmente. 

Es una planta perenne, por lo que la tendremos varios años en el mismo lugar. Tener esto en cuenta a la hora de plantarlas, situándolas en una zona que no afecte mucho al resto de cultivos ni nos moleste a la hora de efectuar alguna labor. Tiene un tallo subterráneo o rizoma de donde salen varias plantitas año tras año.

El cultivo de la alcachofa necesita de clima templado o cálido, por lo que en el sur se da muy bien, con un suelo que retenga el agua, pues necesita bastante humedad durante todo el cultivo, así como el aporte periódico de estiércol descompuesto, compost o abono, dado que agota el suelo.

Para plantarlas podemos emplear semillas, hijuelos o trasladar la raíz o parte de ella a otro lugar. Lo más práctico es adquirir hijuelos que los venden en manojos o macetitas, o sacarlos del pie de la planta cuando veamos que tienen algunas raicillas. Normalmente el primer año no suele dar alcachofas de calidad, en el segundo año suelen ser mejores.

La planta en pleno desarrollo suele tener un gran porte; las que dan alcachofas redondas suelen ser más bajas (unos 60 cm.), pero las ovaladas me llegan al metro, por lo que al soplar fuerte el viento de Levante (h.p.) las deja maltrechas, aunque se recuperan con facilidad.

A finales de marzo o primeros de abril me suelen salir las pequeñas alcachofas del centro de la mata y en unos cuantos días engordará lo suficiente para cortarlas. Iremos cortando a medida que salgan para que la siguiente tanda engorde, y así hasta que podamos o queramos, pues las primeras son las mejores. Corta la alcachofa con un buen trozo de pedúnculo para que se mantenga fresca más tiempo. 

Una vez finalizada la recolección de las alcachofas, que no dura mucho, pues a estas alturas ya hace bastante calor y tienden a desarrollar la flor (de color violeta), reduciremos los riegos para que entre en reposo. Durante el verano quedarán prácticamente los tallos con las alcachofas no recogidas en flor, procederemos a cortar éstos dejándolos en un tercio de su altura.

La planta desaparecerá menos su raíz, por lo que a finales de agosto empiezan a salir los nuevos hijuelos y volveremos a empezar.

Es una planta bastante dura y resistente pero padece algunas plagas y enfermedades como son los pulgones (verdes y/o negros), barrenador, caracoles, o los topos que no dejarán una sana, etc., así como enfermedades como el mildiu y la oidiopsis (ceniza o blanqueta) son las más comunes y deterioran las hojas, debilitando las plantas. Para combatir éstas plagas y enfermedades existen muchos remedios de todo tipo, desde quitar manualmente caracoles y hojas amarillas, hasta productos fitosanitarios ecos o no, eso es cosa de cada uno. 


Veis que no es un cultivo muy difícil y no da muchos  problemas y con un poco de dedicación obtendréis unas alcachofas o alcahuciles, como los mayores las llaman por aquí, ricas en vitaminas, minerales y fibra muy beneficioso su consumo para la diabetes, el hígado y todo el organismo en general.

Espero que os haya gustado  y servido esta entrada y hasta pronto.

Cebollas.

                                                                 
    Cebollas, cebollinos, cebollas tiernas y cebolletas

Las cebollas, conocidas por todo el mundo son esos bulbos de color blanco o rojo que nos sirven tanto para nuestra alimentación como para nuestra curación, con ese olor fuerte y sabor picante y muy utilizado en nuestras cocinas.

Bueno, como lo que nos gusta es sembrarlas, vamos a empezar. 

Lo primero es añadir a la tierra donde las instalaremos un poco de estiercol muy descompuesto y cenizas de madera para aportarle potasio y fósforo. Luego desmenuzaremos las tierra pasando la motoazada hasta dejarla muy suelta y fina. 

Una vez lista la tierra procederemos a levantar unos pequeños caballones donde asentaremos los pequeños cebollinos, que previamente habremos sacado en un semillero o comprándolos en manojos de unas 100 plantas a un precio muy económico, enterrándoles el pequeño bulbito con sus raices y dejándolos derechitos, a una distancia unas de otras de unos 25 centímetros.

Una vez terminemos de plantar, procederemos a regar, y dependiendo de la época iremos efectuando riegos periódicos para mantener el suelo húmedo, sin encharcar, pues ajustandolo bien tendremos buenas cebollas. Tambien es muy importante mantener el terreno bien escardado, así lo conservaremos libre de hierbas y suelto para que engorden bien los bulbos.

Aunque las cebollas crecen bien en todas las zonas, requiere temperaturas altas para la formación de los bulbos.

Yo he plantado cebollinos a finales de octubre y a mediados de febrero estoy recogiendo las primeras cebollitas tiernas o cebollitas largas como decimos por aquí, especialmente empleadas para las tortillitas de camarones. Si queremos cebollas gordas deberemos esperar hasta que las hojas empiecen a amarillear y secarse, dejando de regar dos semanas antes de sacarlas. Entonces las extraemos de la tierra y las dejamos secar durante unos días sobre el terreno y ya estarán listas para su consumo. Se pueden guardar en lugar fresco y seco durante bastante tiempo.

Las cebolletas son muy parecidas a las cebollas, con bulbo pequeño o sin formar, con sabor y aroma similar pero más suave.

Las cebollas tienen pocas plagas, como el alacrán cebollero y la mosca de la cebolla y algunas enfermedades producidas por hongos como el mildiu y la roya que afectan a las hojas, aunque en general la plantación de cebolla no me ha dado problemas de ningún tipo.

                                                Adiós amigos, hasta la próxima entrada.

Ajos

       MEDICINALES AJOS

El ajo, planta empleada en la cocina mediterránea desde antiguo, pero también utilizada como planta medicinal, con ese olor y sabor que lo hacen inconfundible. 

Para su cultivo el mejor clima deber ser caluroso y no muy lluvioso, pues los bulbos se desarrollan con temperaturas más bien altas, por lo que los plantaremos a pleno sol, no necesitando riegos periódicos pero sí humedad en la tierra.

Para tener unos buenos ajos deberemos de añadir a la tierra estiércol muy fermentado con antelación y con la motoazada darle varias vueltas y dejarla muy suelta. Dado el clima de mi zona los planto en octubre, pero en zonas muy frías se puede dejar para principios de primavera.

Una vez tengamos preparada la tierra, dispuesta en pequeños caballones en línea para facilitar el riego, hundiremos un diente de ajo con la punta hacia arriba unos 2 o 3 centímetros, separando cada ajo unos 25 centímetros. Pondremos tantas hileras como queramos separadas unas de otras por 30 centímetros.

Una vez finalizada la plantación humedezco la tierra por aspersión, no necesitando regar demasiado si tenemos un otoño-invierno normal de lluvias. Cuando comiencen a subir las temperaturas deberemos procurar que la tierra tenga humedad, sobre todo si sopla el viento de Levante.

Si queremos unos ajetes tiernos y frescos podemos recolectar algunos ajos antes de que se forme el bulbo, o hacer una pequeña plantación más densa de ajos.

No tiene exigencias especiales para el cultivo, pero deberemos de trabajar la tierra para que quede mullida y sin hierbas y aporcándola a la mata, así podrá engordar con facilidad.

Es importante no dejar florecer el tallo floral cuando crece. Hay que quitarlo, pinzándolo o arrancándolo, así la cabeza engordará más.

Tampoco presenta en general muchas enfermedades ni infecciones, siendo la roya, la alternaria y el mildiu las que nos pueden atacar a la planta del ajo.

Debemos dejar el ajo en la tierra hasta que las hojas empiecen a amarillear y se marchiten, -a principios de verano-, momento ya de ir sacando las cabezas, y poniéndolos a secar durante un día. Se deben guardar en un lugar fresco y sin humedad y tendremos ajos para varios meses.

Como veis no es un cultivo difícil, aunque tendrá ocupado el terreno durante muchos meses, problema éste para los que disponen de una parcela pequeña.

Espero que os sirva y gracias por leerme.

Cultivo de Rábanos.

   TIERNOS Y SABROSOS RÁBANOS

Hola amig@s

Existe una gran variedad en formas y tamaños de rábanos, de cultivo en invierno o verano, colores, etc., por lo que cada cual deberá buscar la que le va mejor a su zona.

Dado el clima existente en la mía yo tengo varias variedades que van muy bien y que son el "murciano", "punta blanca" y "redondo gigante"; todos ellos los siembro a partir de octubre hasta abril, pues más allá, las temperaturas altas los dejan fibrosos y picantes.

El terreno para la siembra debe estar muy desmenuzado para que el rábano engorde, por lo que haremos varias pasadas con la motoazada en la parcelita a sembrar, hasta que quede la tierra suelta. 

Luego rastrillaremos para dejar el terrero llano y esparciremos las semillas sobre el mismo, a voleo o como mejor querais, eso sí, no pisarlo para que no se compacte la tierra. 

A continuación pasar el rastrillo de forma suave para que se cubran un poco las semillas y proceder a regar por aspersión hasta dejar el suelo muy húmedo. Si llueve, despreocuparos, si no, mantener el suelo con bastante humedad y a los pocos días tendréis un montón de pequeñas plantitas. Si están muy juntas aclararlas un poco, aunque no mucho, y seguir manteniendo el suelo con cierto grado de humedad (nunca encharcarlo) hasta la recolección que suele ser de 40 a 50 días. No dejarlos durante mucho tiempo en la tierra, pues se ahuecan y su carne se pone fibrosa y picante. Recolectarlos cuando veais asomar el rábano en la seperficie y tenga buen grosor.

Deciros que los rábanos no son propensos a padecer enfermedades ni plagas.

Como veis es un cultivo sencillo y barato, pues con un solo sobre o paquete de semillas tendréis más rábanos de los que podreis consumir.

Hasta la próxima entrada amigos.

Poda de Pino Piñonero.

PODA DE PINO PIÑONERO 

(Pinus pinea)

     Hola, amigos y compañeros de afición. En esta entrada voy a mostraros como cortar o podarle ramas a un pino piñonero que tengo desde hace unos 15 años, que junto con mi cuñado Moní planté unos piñones en macetitas para sacar pinitos y nos salieron varios, de los cuales uno es el de la foto, que ahora medirá unos 4 metros de altura y otro que planté en la Colada de los Algarrobos. 

Vereis en la web formas distintas y épocas en la que efectuar la poda. Unos que en verano, otros que en invierno, otros que ....., yo lo hago en el mes de enero y, como veis en las fotos, corto con la motosierra las ramas dejando un trozo o muñón que sobresale del tronco, así cicatrizarán más rápido que si la cortamos a ras del tronco. Cuando el pino vaya creciendo, este muñón se irá integrando en el tronco. 

Cuando la rama sea de un buen porte, antes de podarla hacerle en la parte inferior un corte para que, cuando la estemos cortando desde arriba,  el propio peso parta antes de terminar y le produzca un desgarro al tronco.

Tened en cuenta que los pinos sangran mucho al efectuarles algún corte, por lo que recomiendo no podar muchas ramas cada año. Una vez terminada podeis juntar en los cortes una pasta cicatrizadora para que salga la menor cantidad posible de savia o resina, y le entre alguna enfermedad.

Hasta la próxima y espero que les haya servido de ayuda.

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"Los árboles luchan contra el cámbio climático"

Grelos

CULTIVO DE GRELOS EN EL SUR

     Hola compañer@s, aunque parezca raro, por aquí también plantamos grelos y la verdad es que están buenísimos.

En la zona costera de Cádiz el calor nos obliga a retrasar la siembra hasta primeros de octubre, siendo ésta bastante sencilla como veréis.

A esta altura del otoño ya ha llovido bastante y por tanto la tierra está blanda. Con la motoazada desmenuzo la tierra a la que días antes agregué algo de estiércol de caballo. Con el rastrillo aliso la tierra  y se esparcen a voleo las semillas, que son diminutas, por lo que hay que tener cuidado para que no caigan muy juntas. A continuación riego con la manguera por aspersión hasta que quede húmeda la tierra y si llueve de forma regular no tendremos que volver a regar mucho. Esta planta necesita de cierto grado de humedad en el suelo, aunque sin pasarnos.

A los pocos días comenzarán a aparecer las pequeñas plantitas y crecen a buen ritmo, si es necesario se efectúa un aclareo para dejar espacio entre plantas. En diciembre empezaremos a recoger las hojas o nabizas para el consumo a medida que las necesitemos. A finales de enero comienzan a formarse los tallos o grelos que también se consumen, pero hay que recolectarlos antes de que abran la flor.

Una vez florecidas la plantas ya no son comestibles y procedo a arrancarlas y echarlas en la compostera.

Los principales problemas que he encontrado durante el cultivo han sido los caracoles que devoran las hojas y el amarilleamiento de las mismas, posiblemente debido mildiu, por la humedad y temperatura no muy baja en esta zona.

Como veis, con poco esfuerzo y con tiempo favorable disfrutareis de unos ricos y nutritivos grelos para hacer el contundente "lacón con grelos" entre otros platos.

Por último, gratitud para mi cuñada Chelo que me trajo las semillas de Santiago.

Hasta pronto amig@s

La tierra.

LA TIERRA

La tierra o sustrato de nuestro huerto es el soporte principal para nuestras futuras siembras, por lo que será fundamental que esté bien nutrida de todos aquellos elementos químicos para el desarrollo de plantas y frutos y limpia de todo elemento no deseable que encontraremos al comenzar a acondicionarla, como piedras, trozos de cristales, materiales plásticos, troncos, etc, etc., muy común en tierras abandonadas durante años o que deciros en parcelas de pueblos o ciudades para acondicionarlas como huertos urbanos.

Una vez limpia deberemos aportar nutrientes para las plantas, por lo que aquel afortunado que pueda conseguir abono orgánico como excrementos de animales tales como ovejas, vacas, caballos, cerdos, gallinas, etc. conseguirá una buena y sana producción de vegetales; los que no, pues tendrán que conformarse con aportar a la tierra abono químico.

Los excrementos de animales hay que dejarlos amontonado durante una buena temporada para que se transformen en abono listo para añadir a la tierra, pues "frescos" queman las plantas. No tengas prisa en tu huerto, disfruta cada minuto y deja que las bacterias y los pequeños animales hagan su trabajo.

Una vez añadido el abono que puedas darle a tu tierra de labor tienes que proceder a labrarlo con una motoazada hasta mezclarlo y dejarla suelta y mullida. Esto debes hacerlo después de una buena lluvia pues la tierra puede estar dura y compactada y la motoazada más que labrar lo que hará será saltar.

Una vez suelta la tierra y sirviéndonos de dos trozos de hierro y una cuerda fina atada a éstos, tensaremos y procederemos a hacer líneas rectas, amontonando la tierra haciendo caballones para luego poder regar entre ellos.

Otra forma de enriquecer la tierra de nuestro huerto es añadiéndole compost o humus producido por la descomposición de residuos orgánicos. Pero para poder tener una cantidad grande de compost necesitaremos de un lugar amplio donde depositarlos y esperar el tiempo suficiente para la descomposición. Yo tengo por compostera la lámina de acero de una vieja piscina desmontable, donde deposito hojas de plantas, recortes de césped, cartón, material del suelo del gallinero, paja, algo de estiércol, etc, etc., lo mantengo húmedo y al cabo de varios meses (lo que tarde en llenarlo) dispongo de un compost atestado de lombrices  y de un color y textura de tierra negra.

También se enriquece la tierra plantando leguminosas como habas, chicharos, etc., que nitrogenan la tierra con sus raíces.
Se pueden emplear también cenizas procedentes de material vegetal, harinas animales, cal apagada para corregir la acidez de la tierra, etc, etc.

Efectuar la rotación de cultivos os ayudara a mantener equilibrado el suelo, para no empobrecer zonas por plantar siempre lo mismo en ellas.

Recordar que a la tierra que no se le agrega nutrientes con regularidad se irá quedando estéril y pobre y nos dará plantas débiles y frutos raquíticos.

Hasta la próxima amig@s.