viernes, 30 de junio de 2017

Cultivo de la Berenjena

berenjenasLA BERENJENA




          Hola amig@s, en esta entrada voy a hablaros del cultivo de la berenjena, que es una de las hortalizas más bonitas que existen, con esa suavidad y color morado brillante, aunque también existen de color blanco, negro, violeta, alistadas, veteadas, y aunque en un principio no fue muy bien aceptada como alimento por los occidentales, llegando aún en el siglo XIX a decir que era indigesta, poco delicada e insípida, hoy en día goza de una fama culinaria bastante buena.

La berenjena (solanum melongena) es una hortaliza que procede de Extremo Oriente, se cree concretamente que de la India por haberse allí iniciado su cultivo; desconocida, o mejor dicho sin referencias escritas en Occidente, hasta que los árabes las nombraron en sus libros, como el andalusí Al Awan, en su tratado "Libro de  Agricultura" (siglo XIII). Por tanto fueron los árabes, en sus invasiones, los que la trajeron a la Península Ibérica y de allí pasó a Europa y América.

Esta planta, de la familia de las Solanáceas, como el tomate, la patata, el pimiento, etc., requiere más calor que estos para su cultivo; es una planta perenne pero cultivada como anual, tallos rígidos, hojas grandes y con vellosidades en el envés y raíces profundas. Flores color violeta y frutos de buen tamaño, de varios colores y formas.


Las variedades de berenjenas  están clasificadas por su forma y tonalidades del fruto y su planta:
* Esculentum.- Tamaño medio, color variable y forma más larga que ancha.
* Serpentinum.- Alargadas.
* Ovigerum.- Forma de huevo, color blanco o listadas. Llamadas por el andalusí Al Awan, berenjenas egipcias. 
* Depressum.- Forma de pera, cortos y morados, como la berenjena de Almagro.

La berenjena es un cultivo que necesita calor para desarrollarse y dar fruto, por lo que las situaremos en nuestro huerto en una posición a pleno sol, para que reciba muchas horas de luz durante todo el verano.
Le afecta mucho las heladas, no siendo un cultivo aconsejable en zonas frías.

En cuanto al terreno, el mejor es un suelo suelto, con buen drenaje, profundo y al que le habremos agregado estiércol o compost con antelación, y habremos realizado unas pasadas con la motoazada para dejarlo mullido.
Haremos caballones para el riego y poder aporcar luego la tierra sobre el pie de la planta.

Para obtener los plantones de berenjenas, tendremos que hacer un semillero en enero o febrero, teniendo en cuenta que la temperatura mínima de germinación es de 15 grados C., para que en el mes de abril podamos trasplantarla al lugar definitivo. También podemos optar por comprar plantones en algún vivero o tienda especializada.


Una vez que los plantones tengan unos 10 cm. y no haya riesgo de heladas, los pondremos en el pie del caballón, distanciando las matitas unos 50 cm., o más, unas de otras, pues crecen bastante y para que no haya competencia por los nutrientes. A continuación regaremos y mantendremos el terreno siempre con algo de humedad, pues esta planta acusa el estrés por déficit hídrico con rapidez y las hojas quedan lacias, sin vigor, y podemos perder las flores.
Recordar que es un cultivo que necesita de aporte de agua de forma regular,  sobre todo cuando están engordando los frutos.

A medida que la planta va creciendo, iremos aporcándole tierra del caballón al pie, así la mantendremos erguida, contra el viento y el peso de las berenjenas, además de airear la tierra y dejarla suelta.

Otros mantenimientos aconsejables para este cultivo son la escarda de malas hierbas, el entutorado de las plantas para evitar que caigan por el peso de sus frutos o el viento, así como el raleo o aclarado de frutos si nuestras plantas tienen un número excesivo de ellos, así serán más grandes y de mejor calidad las berenjenas. También se efectúan poda de tallos para dejar 2, 3 ó 4, o deshojado de las plantas, para favorecer la precocidad y aireación, pero estas labores van encaminadas a la producción industrial en invernaderos más que al cultivo al aire libre, donde las hojas evitarán quemaduras de sol a los frutos; eso sí, hoja que veamos enferma, la quitaremos inmediatamente y la quemaremos.


Una vez que nuestras berenjenas han engordado y están hermosas y brillantes y con un peso máximo aproximado de unos 250 gramos, será el momento de ir cortándolas a ras de la rama con una tijera de podar, pues el pedúnculo es duro y si tiramos podemos partir la rama. Si dejamos que nuestras berenjenas se pongan muy grandes, estas se llenarán de semillas y no tendrán tan buen sabor.

En cuanto las cortemos de la planta tendremos que meterlas en el frigo pues si no perderá la piel su tersura y tendrá mal aspecto.

Para recoger semillas para la próxima temporada, dejaremos crecer algún fruto, a poder ser de los primeros y más pegados al tronco, sano y bonito. Esperaremos que madure en la mata y quede pasado (no podrido), lo abriremos y sacaremos sus semillas que lavaremos y secaremos rápidamente, guardando luego en lugar seco; teniendo estas semillas un poder de germinación de más de 6 años.



Las enfermedades y plagas que pueden dañar a nuestras matas de berenjenas pueden ser:

Plagas: Mosca blanca, que es la que más me ha afectado en alguna ocasión, así como la araña roja. Luego también podemos encontrar pulgones, trips, nemátodos y algunos tipos de orugas.
Para combatir estas plagas podemos usar insecticidas y acaricidas a base de aceite de neem por ejemplo.

Enfermedades: Podredumbre gris (botrytis cinerea), mildiu (phytophtora nicotinae), tizón temprano (alternaria solani), oídio (leveillula taurica), además de virus mortales inoculados por pulgones o trips. 
Para estas enfermedades podemos usar fungicidas de cobre biológicos o azufre, o realizar algún preparado casero a base de leche, manzanilla, cola de caballo, etc.

En cuanto al valor nutritivo de la berenjena podemos destacar que nos aporta a nuestro organismo vitaminas A, C, B1 y B2, y minerales como Fósforo, Calcio, Hierro, Sodio y sobre todo Potasio.

Bueno amig@s, como siempre espero que os haya gustado y os sirva esta entrada para ayudaros en el cultivo de las magníficas y nutritivas berenjenas, que no son difíciles de cultivar y son muy productivas, ya que con unas cuantas matas que pongamos en nuestro huerto tendremos frutos para regalar.



Hasta la próxima compañer@s.



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viernes, 23 de junio de 2017

La Lavanda.

LA  LAVANDA



    Querid@s amig@s, voy a hablaros en esta entrada de una rústica y bella planta, con porte arbustivo, de la que tengo un gran ejemplar en mi huerto desde hace muchos años, pero le hago poco caso y la pobre pasa algunas temporadas, sobre todo en verano, que no se como no se marchita, pero ella sigue ahí y me regala lo mejor que tiene, sus bonitas flores de color violeta-azuladas. Esta maravilla es la lavanda (lavándula angustifolia = lavándula officinalis).

Esta planta, del genero de las lavándulas, que consta de 39 especies, y que están distribuidas por la cuenca mediterránea, llegando hasta el sur de la India, aunque en la actualidad están distribuidas y adaptadas por todo el mundo.

El nombre común por el que se conoce a estas plantas son: lavanda, alhucema, espliego, cantueso, lavandín (los híbridos), etc.

Es perenne, semiarbustiva, llegando a sobrepasar el metro de altura, con el tronco de la base leñoso, y verdes los tallos superiores, llenos de hojas alargadas, que dependiendo de la especie serán más o menos largas y anchas, y las flores en forma de espigas con pétalos superiores color violeta-azulados, que nacen sobre un fino y largo tallo.

En su hábitat natural vive en suelos pedregosos y calcáreos, con poco humus, por lo que para tenerlas en nuestro huerto o jardín no tendremos que buscarle la zona más fértil precisamente, pero sí una posición soleada, o por lo menos con bastantes horas de sol. Aguanta bien las bajas temperaturas.

En cuanto al riego, la verdad es que necesita bastante poco, pudiendo aguantar los climas muy cálidos con poco aporte de agua. La zona donde la plantamos no debe nunca quedar encharcada porque es sensible a la asfixia radicular.

Si queremos reproducir esta planta, lo mejor es hacerlo por esquejes, pues las semillas tienen una baja germinación.
Podemos coger esquejes de madera semidura para plantarlos en verano, o de madera dura en invierno. Cortaremos estaquillas de unos 12 a 15 cm., quitando las hojas basales hasta dejar solo las del tercio superior y meteremos en tierra suelta y buena, manteniéndola húmeda.

Los cuidados para esta planta, prácticamente se reducen a quitarles las malas hierbas de su base, pero con precaución al efectuarle escardas para no dañar las raíces superficiales, y la poda, pues cuando la planta se va haciendo vieja crece mucho hacia arriba y tiende a deja las ramas bajas desnudas y a la vista, por lo que cortaremos, después de la floración, unos 10 cm. todas las ramas y tallos.

Las plagas y enfermedades de esta planta son escasas, siempre que cumplamos sus requerimientos básicos de suelo, sol, agua, etc., pero como todas, tiene sus enemigos como coleópteros o polillas, así como enfermedades producidas por hongos en raíces, hojas y tallos bajos, como septoria, rosellinia, etc. 


Para recolectar y secar las flores de lavanda, el mejor momento es cuando comiencen a abrir las flores, pues su aroma es más intenso. Haremos pequeños ramilletes que colgaremos en un lugar ventilado, seco y a la sombra. 

El principal producto que se aprovecha de estas plantas es su aceite esencial, que se extrae por destilación al vapor de su flores, aunque también se pueden realizar infusiones; además se emplea para dar fragancia a jabones, cosméticos y perfumes, y nos puede servir como repelente de insectos.
Para su uso como fármaco (*), el aceite esencial, que tiene la capacidad de reducir el dolor y la inflamación, sobre todo de la piel, es sedante y antiséptica, por lo que sirve para:

* Depresión, nerviosismo, insomnio.
* Trastornos digestivos, como hinchazón abdominal por gases, vómitos, náuseas, malestar estomacal, pérdida de apetito.
* Contra migrañas, dolores de muelas, esguinces, dolor en articulaciones.
* Contra el acné, dermatitis, quemaduras.
* Infecciones leves de garganta y bronquios.

No se deberá utilizar el aceite esencial de lavanda en casos de Crohn, colitis o intestino irritable, epilepsia o Parkinson, hepatitis o cirrosis, además las mujeres durante el embarazo o la lactancia, y en niños.
El aceite esencial en dosis elevadas es tóxico.


Además de los aceites esenciales, podemos preparar una infusión de flores de lavanda, con dos cucharaditas de estas en una taza, agregamos agua hirviendo y tapamos, dejamos reposar 10 a 15 minutos y endulzar si se quiere. Siendo bueno para el estrés y el dolor de cabeza.
Si hacemos esta misma infusión pero con 5 cucharaditas de hojas secas, nos servirá para lavar  y desinfectar heridas leves o ulceraciones, quemaduras, etc.

También se pueden hacer maceraciones, tinturas, vinagres de lavanda, agua de lavanda, agua de baño, lociones, mascarillas, etc.

Otras aplicaciones son quemar sus flores secas para perfumar las habitaciones y asegurar el sueño, -a lo que mi padre era muy aficionado en las tardes de invierno, incluso yo lo realizo aun alguna que otra vez-, y en los braseros de carbón hasta hace unas décadas para dar paz y tranquilidad. Todo esto son reminiscencias de tiempos pasados, donde esta planta estaba muy ligada a ritos mágicos.


Bueno compañer@s, no quiero extenderme más para no aburriros y espero que os sirva esta entrada sobre tan rústica y bonita planta, que nos puede alegrar nuestro huerto o jardín durante más de diez años, sin apenas problemas, además de atraer abejas y otros polinizadores, buenos para nuestros cultivos.


Hasta pronto amig@s.


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(*) Ref. "Lavandula Angustifolia".- Juan Ignacio Canales. CFGM Farmacia y Parafarmacia.

viernes, 9 de junio de 2017

Enfermedad del Mildiu.

EL  MILDIU





     Hola amig@s, hoy quiero hablaros de una de las enfermedades que más daños hacen en plantas y muchos cultivos en el mundo, produciendo pérdidas económicas enormes y un enojo considerable cuando la vemos aparecer por nuestros huertos. Esta indeseable enfermedad de las plantas es el maldito Mildiu.

El caso más grave de infección por mildiu (tizón tardío) fue el que se dio en Irlanda, llamada "la gran hambruna", entre 1846 y 1849, donde se perdió el cultivo de patatas, base de la alimentación de los campesinos Irlandeses de la época, y que provocó entre muertos y emigrados más de 2 millones de personas.

Esta enfermedad la producen unos minúsculos hongos de la Clase Oomicetes que prosperan en ambientes de alta humedad y temperaturas moderadas; es un endoparásito (que vive en el interior) atacando el tejido de las hojas, tallos y tubérculos, pudiendo en casos graves de infección destruir todo el cultivo.

La diseminación de las esporas se realiza a través del viento o del agua de lluvia desde los espongiarios de las plantas enfermas.

El rango de temperatura en la que estos hongos desarrollan sus ataques sobre las plantas se encuentra entre los 10 y 30 grados centígrados, siendo las óptimas 18-24º C. Temperaturas por debajo de 10º C. impiden su desarrollo, y las superiores a 30º C. hacen que los hongos detengan su desarrollo, siendo el factor más determinante de su desarrollo la humedad ambiental muy alta (>75%), con prolongados períodos de película de agua sobre la superficie de la planta, como lluvias, nieblas y rocío, además si viene acompañada de vientos fuertes, pues el cóctel perfecto para expandir las esporas.

Algunos síntomas reconocibles del mildiu en cultivos pueden ser:

* Especies del genero Allium como cebolla, puerro, chalota, ajo, etc. (hongo Peronospora destructor).- zonas alargadas y descoloridas en parte superior de las hojas. Si las condiciones son óptimas estas manchas se recubren con las esporas de los hongos tomando color morado.


* Crucíferas, como la col, coliflor, brócoli, colinabo, romanescu, rábano, etc. (Peronospora parasítica).- En hojas, manchas cloróticas limitadas por los nervios que con el tiempo se seca.


* Patata y tomate (hongo Phytophthora infestans).- manchas marrones, en hojas y tallo, que si lo afecta por entero puede romper. Si las condiciones son idóneas continuará produciendo esporangios, permitiendo el avance de la enfermedad.


* Pimiento (Phytophtora capsici).- también llamada tristeza del pimiento, pues lo marchita, atacando raíz y tallo. Manchas en las hojas.


*Berenjena (Phytophtora nicotianae).- Manchas irregulares en las hojas, de aspecto graso y que terminan secándolas. En el envés se aprecia un aspecto blanquecino, que se aprecia hasta en el fruto.

* Lechugas (hongo Bremia lactucae).- En cara inferior de las hojas se aprecia la formación de las esporas en tono blanco grisáceo. Por el haz manchas cloróticas (amarillas).

* Espinaca y remolacha (hongo Peronospora farinosa).- Idem anterior.

* Cucurbitaceas, como calabaza, melón, sandía, pepino, calabacín, etc. (hongo Pseunodospora cubensis).- Manchas amarillentas en el haz de las hojas de forma irregular, que avanza normalmente desde el centro de la planta hacia el exterior, se necrosan las hojas y se desfolia la planta.


* Vid (hongo Plasmopara viticola).- Manchas típicas de aceite en el haz y pelusilla blanca en el envés.


* Habas y guisantes (Peronospora viciae).- En el haz manchas cloróticas que pueden llegar a ser marrones y necróticas y en el envés eflorescencias blanquecinas del hongo, ligeramente grisácea o violeta.

* Apio y zanahorias (Plasmopara nivea).- Hojas amarillentas y luego se necrosan y secan.



Los remedios que podemos poner para intentar evitar o minimizar los ataques de estos hongos pueden ser, entre otros:

  • Rotación de los cultivos.
  • Utilizar variedades locales.
  • Utilizar semillas y tubérculos sanas y desinfectadas.
  • Utilizar especies resistentes a la enfermedad.
  • Dejar espacio entre plantas para su buena aireación.
  • No regar por aspersión.
  • Mantener el suelo limpio de malas hierbas.
  • Buen drenaje del suelo.
  • Quema de plantas o restos infectado.

Donde hay altas posibilidades de infecciones se deben actuar de forma preventiva antes de que se desarrolle la enfermedad. El buen control del mildiu hay que realizarlo antes de que aparezcan los daños, por eso cuando se den las condiciones climáticas favorables al desarrollo del hongo hay que actuar con algún fungicida de contacto.
Una vez que se aprecian los daños y el hongo se ha establecido en el cultivo, habrá que utilizar fungicidas de acción sistémico (que circula por la savia de las plantas).

Para combatir ataques de esta enfermedad, de forma preventiva o muy inicial, en nuestras plantas y cultivos podemos emplear fungicidas caseros, como el de manzanilla, de leche, de bicarbonato potásico, de cola de caballo, de ajo, etc.

También el del "caldo bordeles", el más antiguo y más usado como fungicida, así como el azufre en polvo o mojable.

En el mercado existen multitud de preparados tanto preventivos como sistémicos, desde fungicidas basados en el cobre, biológicos o no, extractos de cola de caballo y otros vegetales, etc., etc., aunque recomiendo, como siempre, elegir productos para agricultura biológica.


Bueno amig@s, espero que os sirva esta entrada para prevenir y controlar los ataques del mildiu en vuestros huertos y jardines, pues en poco tiempo puede dar al traste con el trabajo e ilusión que habíamos puesto en un cultivo.


Hasta pronto y vigilad que el enemigo está ahí afuera.



🍁 🍇 🍂 🌿 🌾 🌽




viernes, 2 de junio de 2017

Cultivo de la Manzanilla.

manzanilla

LA  MANZANILLA





      Estimad@s compañer@s, voy en esta nueva entrada a hablar de una planta medicinal extraordinaria y que he consumido desde que era niño, pues no faltaba en casa nunca, y mi madre nos la daba cada vez que teníamos dolor de tripa o vómitos. También la recuerdo cuando íbamos a casa de mi abuelo Antonio, en Morón de la Frontera, que ya os he contado alguna vez que era un gran herborista, y las ponía a secar en un sótano que daba al patio y a mi me encantaba entrar allí y percibir un olor muy agradable a todo tipo de hierbas recogidas del campo, entre ellas la estupenda manzanilla. 

Aunque procedente de zonas templadas de Europa y Asia, estas plantas se han distribuidos por todo el mundo.

El hombre ha utilizado esta planta desde siempre, pues se usaba en el antiguo Egipto contra muchas enfermedades y la consagraron al dios Sol. Griegos como Hipócrates describen a la manzanilla y algunos de sus usos en escritos médicos que forman los Tratados Hipocráticos. Fue durante la Edad Media cuando se extendió más su uso por todas las clases sociales, perdurando hasta nuestros días.

Tenemos varias especies de manzanilla, pero para emplearlas como remedios medicinales, las más comunes son la Matricaria recutita (manzanilla dulce o alemana) y Chamaemelum nobile (manzanilla romana). También existen endemismos como la Artemisia granatensis boiss, en peligro de extinción, que se da en Sierra Nevada (Granada) y que a un pastor por poco le cuesta dos años y tres meses de prisión por recolectar 190 gr. de esta manzanilla real.
Existen otras especies que son adulterantes o sustitutivos de baja calidad comercial de la manzanilla. No todas las manzanillas están clasificadas como oficinales.

La manzanilla dulce (matricaria recutita) es una planta anual, de hasta 50 cm. de altura, con hojas divididas en segmentos estrechos. Las flores forman una cabeza amarilla hueca con sus lígulas blancas (pétalos). Florece en primavera y se encuentra cerca de tierras de cultivos o en barbechos, y muy cultivada en huertos y jardines. Es la que tengo sembrada.
La manzanilla romana (chamaemelum nobile), es una planta perenne, de hasta 30 cm. de altura, con tallos rizomatosos y hojas divididas. Las cabezuelas, salen aisladas, son macizas y amarillas con lígulas blancas. Florece al final de primavera o durante el verano. Se encuentra en zonas de pastoreo de ganado.

Hoy en día la mejor forma de tener manzanilla para secarla y guardarla para el año es hacer tu propio cultivo de ella, pues es muy fácil y no necesita mucho espacio. Las semillas podemos adquirirlas en tiendas especializadas.

Esta planta es poco exigente en cuanto al suelo, aunque prefiere los arenoso-arcillosos rico en humus, que drenen bien pero que retengan algo de humedad, tolerando algo la salinidad. El PH idóneo está entre 7 u 8.

Gusta de clima templado o templado-frío, aguantando las heladas. La posición será soleada o con algo de sombra; yo la tengo toda la mañana con sol y por la tarde sombreada. También conviene resguardarla de vientos fuertes, pues sus tallos son delgados y débiles, y las tumbará sobre la tierra.

Para plantar manzanilla, primero desmenuzaremos el terreno y lo dejaremos suelto, luego esparciremos las minúsculas semillas sobre el y regaremos por aspersión, para no mover las semillas, y mantendremos el suelo húmedo hasta que broten las pequeñas plantitas. La fecha para poner las semillas en tierra es a principio de primavera -yo lo hago en febrero- y a los pocos días brotarán.


En cuanto al riego, señalar que dado que se desarrolla durante la primavera las lluvias mantendrá el terreno húmedo, caso de escasez de las mismas, regaremos cuando el suelo esté seco, evitando mojar las hojas si las temperaturas son altas para evitar ataques fúngicos. 

Los mantenimientos que tendremos que efectuarles durante su desarrollo, prácticamente se limitarán a la eliminación de malas hierbas que broten entre ellas, generalmente al principio dado su pequeño tamaño, para que no las sofoquen.

Es una planta que apenas tiene enfermedades y plagas, aunque puede ser atacada por pulgones, trips o mosca blanca, además de algunas enfermedades fúngicas si nos pasamos con el riego.


De la manzanilla utilizaremos para hacer nuestras infusiones las cabezas o flores, que iremos recolectando en cuanto comiencen a brotar y se abrán un poco; esta operación la iremos realizando mientras siga dando flores. Una vez cortadas las pondremos a secar al aire y a la sombra, extendidas sobre una bandeja o cesta plana; una vez bien secas las guardaremos en un bote de cristal, bien cerrado y que no le de luz.
Esta manzanilla nos servirá para consumirla durante un año, pues luego pierde sus propiedades, al igual que casi todas las plantas medicinales.

También de esta planta se extrae aceite que se usa en cosmética, perfumería y licores.

Como planta medicinal la manzanilla se ha utilizado tradicionalmente como remedio para:

* Dolores de estómago.- Infusión.
* Náuseas y vómitos.- Infusión.
* Indigestión.- Infusión.
* Dolores menstruales.- Infusión.
* Reumatismos.- Infusión.
* Calambres.- Infusión.
* Jaquecas y migrañas.- Infusión.
* Nerviosismo.- Infusión.
* Inflamación de la piel y eccemas.-  Cataplasma.
* Cicatrizante.- Cataplasma.
* Gripe, catarro, bronquitis.- Inhalaciones de 10 minutos del vapor de infusión de 15 gr. de manzanilla en 750 ml. de agua.
* Asma.- Infusión de manzanilla con hierbabuena en igual proporción.
* Descanso de ojos.- Infusión templada sobre los ojos.

La infusión de manzanilla se prepara con una cucharadita de hojas de flores secas en una taza, se añade agua hirviendo, se tapa y se deja reposar 10 minutos. Colar y endulzar si se quiere. Se pueden tomar 3 o 4 al día.


Las manzanillas no es aconsejable tomarla durante el embarazo y la lactancia materna, así como personas alérgicas a las plantas de la familia asteraceae (compositae).

Bueno amig@s espero que os sirva esta entrada para el cultivo y manejo de esta estupenda planta, que es la más popular de las plantas medicinales, fácil de cultivar y que en un trozo de nuestro huerto o jardín nos dará suficiente para nuestro consumo, además de alegrarnos la vista con su verdor y sus bonitas flores.


Hasta pronto amig@s.



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