viernes, 28 de abril de 2017

Cultivo del Puerro

EL PUERRO






Hola amig@s, vamos a tratar hoy del cultivo del puerro (apium porrum); esa hortaliza que parece la mezcla del ajo y la cebolla aunque con aroma y sabor más suave, es una planta herbácea anual, de la familia de las liliáceas, con tallo de 60 a 80 cm., hojas planas, flores en umbela de color blanco rojizo, y cuyo bulbo es alargado.

La primera constancia que se tiene de esta hortaliza está datada en el año 1.200 a.C. en un papiro Egipcio, en el que se describía entre otros alimentos que Ramsés llevó en un viaje y se componía de 60 cestas de puerros. También tenemos constancia escrito de que los fenicios lo cultivaban, por lo que parece aceptable que su procedencia es de la zona de Oriente próximo y Mediterráneo oriental.

Esta planta es bienal para realizar su ciclo completo, pero se cultivo como anual. El clima idóneo es templado y húmedo, aunque aguanta altas temperaturas siempre que no le falte el suministro de agua, y hay variedades para zonas frías, así como para cultivo temprano, medio y tardío.
La posición en el huerto será a pleno sol, no siendo buena idea plantar en zona que le de sombra, pues crecerán menos.


El suelo ideal para el cultivo de esta hortaliza es profundo, arenoso con aporte de compost o estiércol muy pasado y agregado al suelo con bastante antelación a la siembra, aunque se pueden sembrar en casi cualquiera terreno, siempre que drene bien, siendo los suelos pesados los menos indicados por retener mucha humedad o quedar encharcados y los pedregosos tampoco son buenos.

Para plantar los puerros, en primero lugar haremos varias pasadas con la motoazada para dejarlo suelto y mullido, luego tendremos que procurarnos ejemplares de un diámetro parecido al grosor de un lápiz y los enterraremos unos 10 cm., dejando entre plantas unos 15 cm. y entre 30/40 cm. entre filas, he iremos aporcando tierra a medida que vaya creciendo para que blanquee el tallo. También se pueden sembrar directamente enterrando las semillas, poco profundas, en surcos.

El riego es de suma importancia para el buen desarrollo del puerro, necesitando humedad en la tierra durante todo el desarrollo de la planta, pero sin que llegue a encharcarse o le producirá pudrición de las raíces.
Dado que por aquí se planta en otoño, aunque se pueden plantar todo el año, las lluvias lo mantendrán con humedad, caso de escasez habrá que estar pendiente para efectuarles los riegos que precise.

En cuanto a labores de mantenimiento, la principal será la escarda de malas hierbas, aporcando tierra al mismo tiempo para ir cubriendo la mata.

Este cultivo permanecerá en tierra durante más de 5 meses, y a la hora de recolectarlos lo mejor es hacerlo con una horca, clavándola en la tierra y haciendo palanca, sacar los puerros.


Las plagas que pueden atacar a este cultivo son:
mosca de la cebolla, polilla de la cebolla, trips y nematodos.
En cuanto a enfermedades pueden ser: mildiu, la roya, el tizón, la botritis y la alternaria.

Para evitar enfermedades y plagas hay que rotar siempre los cultivos, por lo tanto no sembrar puerros en la zona donde anteriormente los hayamos plantados, así como otras hortalizas de su familia.

Esta planta además de para preparar platos como ensaladas, sopas, purés, o dar sabor a muchas comidas, es también conocida por sus cualidades medicinales, siendo muy recomendable para la afonía en decocción de su pulpa en agua, también cataplasmas contra hinchazones, contra picaduras de insectos friccionar la zona con un trozo recién cortado. Además es diurético, puede ayudar a reducir el colesterol,  la presión arterial alta, es aperitivo y digestivo, etc., etc.

Bueno compañer@s, como veis, el humilde puerro que ha calmado el hambre de pobres y ricos desde tiempos remotos, es una hortaliza fácil de cultivar en nuestros huertos y macetas y nos aportará al organismo vitaminas A y C, así como Potasio, Fósforo, Calcio, Sodio e Hierro, además de alegría.


Espero que os sirva y hasta la próxima amig@s




viernes, 21 de abril de 2017

Cultivo de la Borraja.

LA BORRAJA





Estimad@s amig@s, estamos en primavera, concretamente a primeros de abril y tenemos el campo repleto de plantas silvestres, entre ellas está ya florecida la borraja (Borago officinalis), planta silvestre pero que también se ha cultivado en los huertos desde siempre, tanto para alimento humano como para aprovechar sus propiedades medicinales.

Esta planta es originaria de la Península Ibérica. Naturalizada en zonas templadas de Europa y norte de África; habiendo llegado al Suroeste de Asia.
No se tiene constancia de su cultivo hasta el siglo XV, aunque como planta medicinal era conocida desde la antigüedad.
Fue una de las primeras hortalizas que llevaron los españoles a América, habiéndose cultivado en huertos de La Isabela (Rep. Dominicana) en 1.494.

Es una planta herbácea, anual, que puede llegar a 1,5 metros de altura, sostenida por una fuerte raíz pivotante. Tallo grueso, hueco y carnoso, y hojas simples y ovaladas, llenas de pelos o tricomas, que en algunas pueden llegar a ser pinchos. Inflorescencia muy peculiar en ramilletes de forma espiral, desde color blanco-azuladas a violetas y sus semillas son como cuatro pequeñitas nueces.

Se encuentran de forma espontánea en bordes de caminos, margenes de las huertas, terrenos baldíos, etc., aunque también se cultivan para aprovechar las hojas y los peciolos para utilizarlos en alimentación como verdura, así como para recolectar sus semillas para la industria farmacéutica y cosmética. Así mismo, es una planta melifera, por lo que atraerá muchos polinizadores a nuestros huertos.

Para cultivar esta planta lo mejor es un suelo franco con bastante materia orgánica, como estiércol o compost, aunque se adapta bien a cualquier tipo de terreno. Formaremos unos caballones donde enterraremos poco las semillas, dejando una separación 30 cm. entre plantas y 50 cm. entre filas. En zonas con inviernos suaves se empiezan a plantar desde el otoño, recolectándolas hasta febrero, que comienzan a florecer.

Soporta bien el frío, aunque las temperaturas por debajo de 3º C. bajo cero puede ennegrecer el tejido y las inutiliza para el consumo, por lo que habrá que cubrirlas con plásticos.

En cuanto al riego, hay que mantener húmedo el terreno, pues el estrés hídrico provocará la subida de la flor.

El único mantenimiento durante su cultivo será el escardado para mantenerla libre de malas hierbas.


En cuanto a plagas, son los caracoles y babosas que las atacan al principio del cultivo  cuando son pequeñas, así como los pulgones que provocan depreciacion de la planta si el ataque es grave y pueden provocarles enfermedades víricas.

Entre las enfermedades que las pueden atacar están el oídio produciéndole manchas blancas redondeadas con aspecto pulverulento, necrosis en hojas producidas por alternaria, podredumbre del cuello producido por botrytis o sclerotinia.

En cocina, son muy apreciadas en Francia e Italia, sin embargo esta planta no es muy utilizada en España, exceptuando algunas zonas, como Aragón donde se cultiva bajo plástico, así como en Navarra y algo en Valencia, además de cultivarse en huertos particulares.
Para quitarles los pelillos o tricomas se pueden hervir y los perderá o rasparlos con un estropajo de cocina haciendo una pasada por cada cara de la penca.
Los platos que se pueden preparar son innumerables, desde patatas con borrajas hasta borrajas con almejas, pasando por todo un abanico de potajes, ensaladas, arroces, cremas, pastas, pudin, postres, etc., dejando su sabor peculiar en todos los platos.

Desde antiguo se la conoce como planta medicinal, -por eso lo de "officinalis"-, teniendo propiedades para:

Resfriado.- Infusión de 10 grs. hojas en 1 litro agua hirviendo. Fomenta la sudoración y es diurética.
Inflamación de los ojos.- Cocimiento de 5 grs. de hojas en medio litro de agua.
Estimulante cardiaco.- El agua de infusión de las flores.
Gota.- Cataplasma caliente de hojas hervidas.
Disminución de la fiebre.- Hervir un manojo de hojas frescas durante 3 o 4 minutos en 1 litro de agua. Una vez fría se frota suavemente por el cuerpo.
Infecciones Urinarias.- Tomas en infusión.
Retención de líquido.- Infusión.
Antiestrés.- Infusión.

El aceite extraído de sus semillas se utiliza para:
Piel.- Regula secreción sebácea, dejando piel sana.
Sistema cardiovascular.- Favorece dilatación de vasos sanguíneos.
Sistema reproductor.- Alivia los síntomas pre y post menstruales.

Atención: la borraja posee el alcaloide Pirrolizidina que puede dañar el hígado, por lo que no se debe abusar de ella.

Esta planta es rica en vitamina A y C, así como en Potasio, Sodio, Fósforo, Magnesio, Calcio e Hierro.

Bueno compañer@s, como veis la borraja es muy completa, rústica y fácil de cultivar, pero también muy desconocida o relegada en muchas zonas, empleada sólo en épocas de grandes calamidades, pero que grandes cocineros la están sacando del olvido y poniendo en valor, dándole el lugar que se merece.


Hasta la próxima amig@s.





viernes, 7 de abril de 2017

El influjo de la luna en los cultivos.


LA LUNA Y LOS CULTIVOS




¡Que tal amig@s!, hoy quiero hablaros de algo que muchos de nosotros, los que trabajamos y cuidamos plantas de todo tipo, tanto hortícolas como ornamentales, pensamos: ¿será verdad que la luna tiene influencia en todas las labores que practicamos en el huerto con semillas y plantas?.

Desde tiempos remotos el hombre, como especie, ha usado la luna como calendario para controlar el tiempo; fue su primer reloj. También utilizó el sol y las estrellas, como no, pero fue la luna sin duda la que marcó para el agricultor su relación con la fertilidad, vinculándolo con el ciclo femenino.


San Isidoro de Sevilla (siglo V) nos habla de los orígenes del Zodiaco y acepta ciertos influjos de los astros sobre la Tierra.

El sevillano andalusí Al Awan, nos habla en su libro "El libro de la agricultura" (siglo XII/XIII) de las prácticas agrícolas, recopilando datos y en los que él se inspiró en parte, de la  "Agricultura Nabatea" (siglo III-V d.c.) que contenían elementos agrícolas y mágicos a la vez en los procesos de cultivos; aunque Al Awan prescindió de toda la parte esotérica en su obra.

Los agricultores biodinámicos, utilizan para realizar sus labores del campo, desde siembras, trasplantes, realizar sus preparados, etc., etc., un calendario anual, creado por ellos, en los que están marcados los ritmos de las estrellas, el sol y la luna a lo largo de los 12 meses, estando muy detallado las labores a realizar día a día. Dejo enlace en "Web`s amigas" de este blog.

Todo esto viene a colación, de que el hombre y su agricultura ha estado muy influenciado por los movimientos de los astros y es algo que continúa en vigor, siendo la Luna la que más nos marca a la hora de realizar las labores agrícolas y ganaderas.

Al igual que la luna hace que los mares suban y bajen en altura, la savia de las plantas circula de diferente forma dependiendo de la fase de la luna, según estudios, esto es el flujo y reflujo, al igual que las mareas.

Como he dicho, hoy en día muchos agricultores profesionales, aficionados a la horticultura y la floricultura, siguen realizando, principalmente, sus siembras de cultivos, podas, talas, trasplantes, etc., en función del estado de la luna, veamos pues:

La iluminación de la luna llena parace influir en el crecimiento en altura de las plantas, tienen más savia en su parte aérea y es la época para recoger hortalizas y preparar la tierra.

En luna menguante, los procesos que se desarrollan bajo la tierra se ven favorecidos, por lo que será buen momento para incorporar abono a la tierra, la savia se concentra en las raíces, por lo que parece mejor para la siembra de plantas que desarrollarán sus frutos de tierra hacia abajo, como los tubérculos, y algunas verduras de primavera como lechugas, acelgas, etc. es mejor en menguante para evitar (retrasar) la subida prematura de la flor.

En la luna creciente, es el mejor período para la siembra de verduras y hortalizas que se desarrollan de la tierra hacia arriba y que consumimos sus frutos.
En este período la germinación, reproducción y crecimiento de semillas y plantas aumenta.

Desde el cuarto menguante a la luna nueva es un período de poca actividad de las plantas, pues el nivel lumínico es mínimo, las plantas están como en reposo.

Hay que tener muy en cuenta también las fases ascendente o descendente de la luna, llamadas "revolución lunar periódica", para realizar ciertas labores, como son:

Luna ascendente (la luna va subiendo, durante 14 días, en el cielo con respecto al día anterior). La savia de las plantas es impulsada a las partes aéreas, por lo que será momento de injertar, limpiar de maleza el campo o escardar, recolectar aromáticas y flores pues durará más su frescor. 

Luna descendente (la luna va bajando, durante 14 días, con respecto al día anterior). Las fuerzas y savia bajan a las raíces, por lo que será buen momento, o más propicio, para efectuar trasplantes, podar, aplicar abonos, enterrar esquejes y cosechar hortalizas de bulbos, tubérculos y raíz.




También, según lugares y costumbre, he observado que algunas labores agrícolas unos dicen que se hacen en una fase lunar y otros, que esa misma labor, se hace en la opuesta.

Bueno compañeros, lo que está claro es que la proximidad y el tamaño de nuestro satélite influye y mucho en la Tierra. La utilización de las fases lunares para hacer nuestras siembras, podas, injertos, plantaciones, etc. es una práctica milenaria que será cierta en mayor o menor medida, tal vez no, pero por si acaso siempre que puedas y quieras puedes practicarla porque no cuesta nada, y como dice ese famoso dicho gallego: "yo no creo en las meigas, pero habeilas haylas"; pues eso.

Hasta pronto amig@s

- - - - - - - - - - - 


P.D. Tened en cuenta que las forma de la luna durante el cuarto menguante y cuarto creciente se ven de formas opuestas dependiendo del hemisferio donde se esté; asimismo el período de la luna ascendente y descendente es inverso en cada hemisferio.